sábado, 25 de octubre de 2014

Interesante cajón de sastre lasaliano

Una página web lasaliana en la que se puede encontrar un poco de todo, pero todo muy interesante: canciones religiosas, cantos lasalianos, oraciones, libros, meditaciones, datos, chistes... ¡Todo! Además, siempre de manera muy sencilla de acceder y manejar.

¿Responsables? La comunidad cristiana "Lasallistas con Jesús", de León (Nicaragua). ¡Enhorabuena! Habéis prestado un excelente servicio.

Los interesados la tienen AQUÍ.

jueves, 23 de octubre de 2014

Ambositra, escuelas en red

Con los pobres de Madagascar
He aquí un precioso documental que nos pone al corriente de algunas obras de los lasalianos en favor de los pobres de Madagascar, más concretamente de la Diócesis de Ambositra, en la región central del país. Destaquemos tanto el compromisos de los propios lasalianos malgaches, en unión con todo un ejército de maestros y demás personas implicadas en diferente campos educativos, como la ONG lasaliana española PROYDE que colabora en la obtención de fondos para los proyectos.

VER VÍDEO

lunes, 20 de octubre de 2014

Carta a Malala, Premio Nobel de la Paz 2014

El Hermano Superior General, Robert Schieler, en nombre de todos los lasalianos del mundo, ha hecho pública una carta abierta a la reciente Premio Nobel de la Paz, Malala Yousafzai.

En ella, el Hermano Robert alude a la presencia lasaliana en el país natal de Malala, Pakistán, al tiempo que muestra su admiración por el valiente ejemplo de Malala frente a los intransigentes.

El Hermano Robert comenta favorablemente algunas de las ideas que se atribuyen a Malala en relación con el poder de la educación y la importancia de hacerla accesible a todas las personas.

El Instituto de La Salle comparte todos esos planteamientos, como lo demuestra su compromiso educativo y escolar cotidiano en tantos lugares de mundo, que ha sido reconocido por algunos premios, como el Premio Noma de la Unesco, concedido para destacar el trabajo lasaliano en el campo de la alfabetización.

En realidad, y desde hace más de tres siglos, los herederos de san Juan Bautista De La Salle compartimos el pensamiento que Malala ha hecho famoso en estos los últimos tiempos. No en vano, como indica el Hermano Superior General, la misión lasaliana podría resumirse en la siguiente expresión: "Educar a niños y jóvenes con un profundo respeto a su cultura, su fe y sus valores sociales".

Un espléndido texto que todo lasaliano tendría que conocer. Lo tenéis AQUÍ.


miércoles, 15 de octubre de 2014

Asociados para el servicio educativo de los pobres

Un aspecto clave de la misión lasaliana, y de la vida lasaliana en general, es la asociación para el servicio educativo de los pobres. Y es que todo está en esa expresión: la educación, los pobres, la entrega generosa y gratuita, la asociación... La misión, la espiritualidad, el estilo de los de La Salle, en definitiva.

Los lasalianos, asociados, juntos, por medio de la educación, brindamos posibilidades ciertas para la construcción de una sociedad distinta, más justa, más evangélica, mejor

Esto no es un capricho de los Hermanos de La Salle actuales; se trata de algo presente en nuestra institución desde los primeros momentos de su ya larga historia. De hecho, es una de las claves importantes para explicar como se debe nuestra vida de seguidores de Juan Bautista De La Salle.

La asociación para el servicio educativo de los pobres es el secreto que compartimos todos los lasalianos. Religiosos, seglares, mujeres, hombres, solteros, casados... nos sentimos identificados con este proyecto educativo de transformación del mundo al que Dios nos convoca, en el que Dios siempre nos pide algo más y nos exige caminar junto a los pobres de la tierra para conseguir juntos la liberación, es decir, algo cercano a lo que Jesús llamaba “el Reino”. Los lasalianos nos asociamos para dar respuestas realistas y eficaces a ese enorme reto de lo alto.


De estas y algunas otras cosas nos hablan los Hermanos del Distrito de Argentina y Paraguay en el vídeo titulado “¿Qué es la asociación para el servicio educativo de los pobres?”, que puedes encontrar AQUÍ.

miércoles, 8 de octubre de 2014

Un triángulo providencial

Precursores de los Hermanos de las Escuelas Cristianas (10)


La aventura místico-escolar de Juan Bautista De La Salle fue, sin duda, sorprendente, para él y para todos cuantos le rodeaban.

Desde muy pronto parecía evidente su opción por entregarse a Dios mediante el sacerdocio, pero casi todos supondrían, seguramente, que ese no era sino el primer paso de una carrera eclesiástica ambicionada, para tratar de encaminarse hacia un nombramiento episcopal... por lo menos. Así se explica la elección, por parte de Juan Bautista y su familia, de san Sulpicio, el seminario más eminente de la época, a pesar de estar situado en París, lejos de la ciudad natal de De La Salle, y su decisión de estudiar teología hasta el doctorado. Es probable que, en efecto, entre otros objetivos, con esta decisión tratase de ganar puntos para ser considerado un digno candidato a la consagración episcopal...

Pero la Providencia juega sus bazas de manera un tanto incomprensible a los ojos de los hombres, como bien explicó el propio De La Salle en un documento autobiográfico: “Aparentemente, Dios, que gobierna todas las cosas con sabiduría y suavidad, y que no acostumbra a forzar la inclinación de los hombres, queriendo comprometerme a que tomara por entero el cuidado de las escuelas, lo hizo de manera totalmente imperceptible y en mucho tiempo; de modo que un compromiso me llevaba a otro, sin haberlo previsto en los comienzos”. Y es que De La Salle entró en el mundo de las escuelas sin apenas darse cuenta, y, cuando lo hizo, estaba ya tan introducido en ese mundillo que le resultaba del todo imposible, o demasiado violento, echarse para atrás.

De cualquier manera, el primer paso  —inopinado, sin duda—  en dirección al compromiso con los pobres tal vez lo diera el propio De La Salle, en colaboración con su familia, al decidir inscribirse en san Sulpicio, porque allí se concentraba un alto potencial de energía tridentina que, entre otros campos, impulsaba con fuerza el compromiso en favor de los pobres, de la catequesis y de las escuelas cristianas. Y, además, hallándose en París, De La Salle trabaría contacto probablemente con otros movimientos que empujaban en ese mismo sentido, como la comunidad de sacerdotes de san Nicolás del Chardonnet o la de los herederos de Vicente de Paúl, sita en san Lázaro. El paso por san Sulpicio duró poco  —menos de dos años—  pero lo suficiente como para abrirle al joven seminarista una amplia ventana a ese universo, en un momento en que, dada la juventud de Juan Bautista, ciertos planteamientos y experiencias tocarían con seguridad fibras muy íntimas en la persona de Juan Bautista y quedarían hondamente grabados en su interior.

Sin  embargo,  la  cosa  no  quedó  ahí.  Cuando, por razones de imperiosa necesidad familiar —murieron sus padres y tuvo que hacerse cargo de la familia—, Juan Bautista regresó a Reims, el soniquete de san Sulpicio fue cobrando intensidad e insistencia, y terminó por aclarar cada vez con mayor nitidez sus contornos, hasta hacerse perfectamente visible en forma de escuelas para pobres y de maestros. De La Salle había sido captado para la causa. ¿Cómo se produjeron estos hechos? Pues por la mediación directa sucesiva de tres personas entusiasmadas con la misión escolar entre los pobres, tres personas que tuvieron encuentros personales, más o menos intensos, con De La Salle, y que tenían un punto de contacto común en la capital de Normandía: Ruan.

Curiosamente, si de Ruan le llegó al joven canónigo De La Salle la más intensa bocanada apostólica de entre las que le empujaron hacia las escuelas cristianas populares, hacia Ruan partiría también Juan Bautista en el último tramo de su vida, a partir de 1705, para terminar instalando en la ciudad normanda la sede principal del Instituto lasaliano, en san Yon, para ser más precisos. Y Ruan sería, asimismo, la capital que acogería el último aliento del santo sacerdote remense cuando devolvió su vida a Dios, un Viernes Santo de 1719.

Así quedaba definitivamente configurado aquel auténtico triángulo providencial que marcó para siempre la vida del ex canónigo de Reims y del Instituto por él fundado. Los vértices de dicho triángulo habría que situarlos en las tres ciudades claves del itinerario lasaliano de los primeros tiempos: Reims, París y Ruan. Veamos quiénes fueron las tres personas, con raíces profundas en Ruan, que ayudaron a lanzar la aventura lasaliana, y cómo se relacionaron, en concreto, con aquel joven de Reims, recién ordenado sacerdote, que se llamaba Juan Bautista De La Salle.

Hermano Josean Villalabeitia


jueves, 2 de octubre de 2014

Sobre el Hermano Victorino

Los lasalianos cubanos guardan en su memoria el recuerdo de un Hermano excepcional, hoy camino de los altares: el Hermano Victorino, francés de origen pero cubano de adopción.

Un blog se hace ahora eco de un libro que recuerda la memoria del santo Hermano La obra, cuyo autor es el también Hermano Alfredo Morales, apareció en la República Dominicana hace un par de décadas y lleva por título "Hermano Victorino: itinerario evangélico".

Además de mostrar su intensa alegría por la recepción y lectura del citado libro, el autor del blog subraya algunas características de lo que fue la vida y testimonio del Hermano Victorino entre nosotros.

Quienes estén interesados en consultar dicho blog lo pueden encontrar AQUÍ.

El libro en cuestión es fácilmente localizable en Internet.